lunes, 13 de octubre de 2014

«LOS EVANGÉLICOS ME PERTENECEN ELLOS ME DAN CULTO»


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🔹   SUCEDIÓ EN UN
🔹 HOSPITALITO DE LA FE
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     [Así lo dijo...:]
🔹   «LOS EVANGÉLICOS
🔹      ME PERTENECEN.
🔹  ELLOS ME DAN CULTO»
🔹
 Por Favor...
🔹 ES URGENTE: 
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Jamás lo olvidaré...

El sábado 11 de octubre, esto ocurrió celebrando la Santa Misa. Eran aproximadante las nueve de la noche.
Había concluido el momento de la Comunión y estábamos en oración de ACCIÓN DE GRACIAS. Cada uno que quería, decía los FRUTOS que había encontrado durante los tres días de Hospitalito de la Fe que habían transcurrido. Esto pasó en la casa de Retiro «AVE MARÍA» ubicada cerca de Tovar, Merida, Venezuela.

Una madre de familia se levantó y dio gracias a Dios por que había podido recuperar a su esposo que estaba entregado al alcoholismo y había intentado, incluso, matarla a ella. También daba gracias la señora, porque sus dos hijas habían dejado de asistir a un culto de hermanos esperados (pentecostal) y tanto ellas como el esposo habían aceptado la decisión de la esposa de internarse como familia en la casa de Retiro AVE MARÍA, luego que la hermana Dominga, directora de la casa les acogió.

Sucedió que de repente, las dos hijas se levantaron de sus sillas a hablarle muy feo a su propia madre mientras ella daba su acción de gracias, y no eran ellas las que hablaban. Los ojos de ellas revelaban que no hablaban por sí mismas. Era el mismísimo Satanás que había tomado posesión de ellas y reaccionaba ante todo lo que decía aquella madre. Y ocurrió justo cuando la señora decía que en días anteriores el demonio tomaba posesión de sus dos hijas y, entre otras cosas, decía que SUS HIJAS LE PERTENECÍAN, PORQUE LOS EVANGÉLICOS A ÉL LE PERTENECÍAN. Y DECÍA: «SON MÍOS, ME DAN CULTO A MÍ». Y QUE TAMBIÉN QUE SU ESPOSO A ÉL LE PERTENECÍA.

Esto comenzó a suceder en aquella familia luego que sus hijas aceptaron de su madre no regresar más a aquel lugar de culto y que su esposo aceptó la condición que ella le puso: «o dejaba el consumo de bebidas alcohólicas o se separaban como matrimonio».

Nunca podremos olvidar, todos los allí presentes, cuando en aquel momento,mientras aquella madre oraba dando gracias a Dios y a la Virgen María, como Satanás enfurecido contra aquella madre, y usando el cuerpo de sus dos hijas allí presentes en la misa comenzó a decir repetidas veces estas palabras: «tu esposo es mío. Tu me lo quitaste. Y tus hijas también son mías. LOS EVANGÉLICOS ME PERTENECEN. ELLOS ME DAN CULTO A MI»

A mí se me erizó la piel. Y nunca olvidaré lo que todos estábamos viendo y oyendo. Una de las hijas cayó al piso retorciendo su cuerpo y repitiendo esas mismas palabras anteriores. También decían otras cosas en un idioma extraño que no se podía entender. Revestido con los ornamentos sacerdotales, me acerqué primero a la menor de las hijas, de 16 años de edad. Y con la imposición de manos en su cabeza, la oración y la ayuda del agua bendita, el demonio salió de ella y la dejó en paz en cosa de pocos minutos. 

Luego que quedó liberada y de darle un fuerte abrazo de paz, le pedí que fuéramos a donde su hermana mayor, de 18 años de edad, y me ayudara a liberarla. Así fue. Ocurrió, gracias a Dios.
Su propia hermana era la que le pedía que invocara a la Virgen María. Y entre los dos, en breve tiempo, y con el poder y la ayuda de Dios, la joven quedó liberada. Luego la levanté del piso y le di un fuerte abrazo de paz.

Era muy fuerte e intensa la presencia de Dios que se sentía en el resto de la Santa Misa. En la liberación de las dos jóvenes fue de gran ayuda la invocación a la Santísima Virgen María.

Luego de que todo aquello pasó, y que todos se fueron a dormir, me llevé a las dos hermanas a un lugar aparte, y nos quedamos conversando en torno al valor y la necesidad del Sacramento de la Confesión y a otros  temas de la vida en Dios, hasta pasada la media noche.

MENSAJE: 
Les ruego no guardarse
este testimonio, no dejarlo sólo en el recuerdo. Auxiliemos a todos los que podamos que anden atrapados en el alcoholismo, en  algún otro vicio, y muy especialmente, a quienes acuden a esos sitios de culto que no provienen de Dios. Hagámozle saber lo que Satanás dijo en dos hermanas jóvenes que estuvieron poseídas por él:

«LOS EVANGÉLICOS ME PERTENECEN. ELLOS ME DAN CULTO» 

🔹NOTA: Con lo aquí leído no se ofende a nadie. Es una obligación espiritual, y un deber ante Dios, auxiliarles en la Fe. Y perdonen lo extenso de esta Medicina para la Fe.
🔹Texto: Padre Héctor
     Pernía, sdb, mfc.
🔹 13/10/2014
🌳🌲..👬....🌲🌳
      RECIBO, me NUTRO  
            y REENVÍO
MEDICINASPARA LA FE
       OREMOS 
San Francisco de Asís, y
San Francisco de Sales.
Rogad por nosotros.
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